martes, 7 de octubre de 2008

Evaluación cualitativa: Debate del decreto 230 del 2002.

El Decreto 0230 de 2002 restableció la promoción automática que había eliminado la Ley 115 de 1994 o Ley General de educación. La corte constitucional en varios fallos, estableció que el Decreto 1860 de 1994 no contenía la promoción automática y menos, que ésta tuviera carácter constitucional. Es decir, que la promoción automática de los estudiantes en primaria y bachillerato no tiene ningún soporte constitucional. El Ministerio de Educación Nacional lo restableció por un decreto y por un decreto puede ser eliminada.
¿Considera usted que la promoción automática impuesta por el Decreto 230 de 2002, está afectando la calidad de la educación de primaria y secundaria del país y debe ser eliminada como norma obligatoria de evaluación educativa?
Vamos a debatir
!Adelante!

5 comentarios:

Roberto Agudelo Grajales dijo...

A mi modo de ver, sí; porque es muy bueno reconocer las cualidades de los buenos estudiantes; pero la naturaleza, que es tan sabia, ella misma nos enseña, que en todo se deben dejar operar los procesos; es decir, la naturaleza cuando da saltos, genera fenómenos. Esto aplicado a la educación, nos lleva a descubrir que cuando se da la promoción automática necesariamente quedan en el alumno vacíos en cuanto al conocimiento; creo que es mejor dejar que el estudiante viva su proceso normal de formación. Si es buen estudiante, reconocer sus virtudes y cualidades y ponerlo como ejemplo para sus compañeros, pero no promoverlo; ya que por este premio podemos dejar lagunas y vacíos en la formación del muchacho.

La educación hoy por todos estos permisivismos ha hecho que la calidad baje notablemente, ya que a veces nos vamos por la vía fácil; la vía del no esfuerzo, la vía del no autoexigirse; considero que es urgente eliminarla de la norma obligatoria de la evaluación educativa y permitir que el alumno viva su proceso normal de formación.

Andrés Felipe Guzmán L. dijo...

Considero que en este decreto se han de analizar varias situaciones, entre esas cuando el porcentaje de estudiantes que se consideren deben repetir el curso es superior al 5% del total de estudiantes de esa institución.
No considero ni pertinente ni justo que entre estudiantes con iguales deficiencias a unos se les promueva y a otros no.
Considero, por tanto, que la promoción automática no mira a la calidad de la educación sino a la cantidad de estudiantes que "se les permite" avanzar en su proceso estudiantil. Creo que el error del Decreto es poner el tope del porcentaje, en ves de fijar criterios o estrategias legales para que la educación sea más cualificada.

Luz Yepes dijo...

Roberto su posición frente a la evaluación es asertiva y el planteamiento de Felipe es valido,frente a la problemática que nos toca a diario en las instituciones educativas.Pero comparto que la evaluación es uno de los procesos más significativos dentro de la educación. Evaluar es medir la trascendencia del aprendizaje, es identificar los puntos a corregir en la forma como se enseña y en la forma como se aprende.
En mi vida profesional como maestros debemos tener en cuenta que la evaluación que realizo a los alumnos sea objetiva y que la tendencia sea evaluar conceptualmente y no en forma numérica.
Por tal motivo nos encontramos ante una revolución tecnológica que está aceptando un nuevo dominante social donde todas las innovaciones son indicadoras para hacer un alto frente a las épocas pasadas.
Los cambios van a sufragar una nueva primicia sobre las prácticas sociales que son cotidianas creando nuevas metas.

Continuamos el dabate??

Luz Yepes dijo...

Hola Felipe, es cierto que el porcentaje de perdida nos limita realizar el ejercicio de promoción mas objetivamente, pero también es hora de preguntarnos:
¿Qué tan formativo es que un estudiante pase de un nivel a otro sin considerar si se ha logrado avances en lo intelectual y lo social?

¿Cómo combatir en nuestros estudinates la cultura del facilismo?

Lo invito a seguir la cadena de discusión en el tema planteado para la unidad :02. "Lo que todo maestro debe saber".
!Adelante!

Roberto Agudelo Grajales dijo...

La cultura del facilismo se ha de combatir generando expectativas interesantes y agradables en nuestros estudiantes; de tal manera que las propuestas que les hagamos sean llamativas para ellos.

Sabemos que somos fruto de la cultura de que todo entra por los sentidos; entonces tenemos como docentes el reto de hacer de la enseñanza algo agradable, de tal forma que interesemos a nuestros estudiantes con todas las actividades que les propongamos haciéndoles ver que todo lo que aprendan les ha de servir para la vida, teniendo como referente imprescindible una educación con pertinencia social; ésto es, una educación que todos los días está respondiendo a las necesidades de nuestros estudiantes.